En el mundo de los negocios, mantener al día la facturación no solo es un deber, sino una estrategia esencial para continuar con el orden y evitar acumulaciones de trabajo que pueden convertirse en dolores de cabeza. Hoy, en GPA, queremos hablar sobre cómo manejar la facturación con el público en general, una práctica que te recomendamos.

¿Por qué facturar de manera diaria o semanal?

La miscelánea fiscal, específicamente la Regla 2.7.1.21, permite a los contribuyentes elaborar un Comprobante Fiscal Digital por Internet (CFDI) diario, semanal o mensual. Este CFDI debe incluir los importes de cada una de las operaciones con el público y el número de folio o de operación de los comprobantes emitidos, así como el ticket de cada operación o folio interno utilizado, para asegurar el cumplimiento adecuado de las obligaciones fiscales.

Además, es importante recordar que estos CFDI globales deben ser emitidos y enviados al SAT dentro de las 24 horas siguientes al cierre de las operaciones del periodo correspondiente. Este requisito es crucial para mantener la regularidad y cumplimiento de las obligaciones fiscales.

Beneficios de una facturación regular:

1. Claridad Financiera: Sabrás exactamente cuánto está entrando en tu negocio en cualquier momento.

2. Cumplimiento de obligaciones fiscales: Te aseguras de cumplir con las disposiciones fiscales y evitar posibles multas o sanciones por parte de las autoridades.

3. Menor riesgo de errores: Al mantener un registro frecuente, reduces el riesgo de errores o discrepancias en la facturación.

Importancia del CFDI global:

El CFDI global debe incluir de manera detallada el desglose de los impuestos como el IVA o IEPS, separados claramente para cada operación realizada. Este desglose no solo facilita la auditoría interna, sino que también asegura que el SAT reciba toda la información necesaria para validar las operaciones.